25.1.07

Reencuentros

Escuchando lo último de Tv on the Radio (uno de los mejores discos del año ya pasado) me ha venido (facilmente, por otro lado) a la mente el primer larga duración de The Arcade Fire.
Aquel que me comí en todo el principio de ese bello año 2005 enterito.
Aquel disco que puedo asegurar que es el que más me ha sorprendido en todo lo que llevamos de siglo. ¡Qué puta obra maestra!
Lo visto es que los canadienses saquen la continuación del hermosísimo Funeral en el año que acaba de empezar. Así que parece que este año se va a caracterizar por los reencuentros con cosas, situaciones, sensaciones más que especiales en mi vida. Reencuentros como el que voy a tener este fin de semana. Si, vuelvo a Baiona.
Durante muchísimo tiempo pensaba única y exclusivamente en que el calendario llegase de una puñetera vez al mes de julio. Quería pisar la arena del mar, ver una puesta de sol, estar con mis amigos de toda la vida (mucho más que unos simples amigos de veraneo cualquiera). Baiona fue mucho más que un mero mes de vacaciones, era un mes que hacía que mi vida tuviera realmente significado. Ahora puede parece algo excesivamente romántico, trasnochado, infantil. Pero antes no sabéis lo que me importaba. Allí me enamoré por primera vez (amor de esos que llaman platónico, que al final, para variar, no paso nada), allí me inicié en muchas cosas que, buenas o malas, marcan o han marcado mi vida. Allí me hice quien soy ahora.
¿Qué ocurre? Que todo tiene un final en esta vida. Hace 4 años que no piso ese lugar. Por eso lo del sábado me hace tanta (no sé si decirlo correctamente) ilusión. Me parece que me voy a reencontrar con un viejo amigo. Y en realidad me voy a reencontrar con parte de mi vida. Eso es quizás lo que más ilusión me hace.

22.1.07

Otra vez

En primer lugar, una disculpa. Siento no haber dado señales de vida todo este tiempo pero durante un mes y por todo lo relacionado con la mudanza me he quedado sin internet. Así que no he podido ni felicitaros el año nuevo 2007, ni volcar mis pensamientos, mis ansias, mis ilusiones como me hubiera gustado. Pero bueno, que se le va a hacer. Para la próxima aprenderé de mis errores, lo juro (que la formula del prometo nunca me ha hecho mucha gracia).
Por lo demás la vida sigue igual (ni el cambio de casa ha influido mucho) pero con una pizquita de ilusión nueva de un tiempo a esta parte. Así que no me quejo.
De regalo de esa navidad que no os felicité y que ya hace bastante tiempo que se ha ido ya, un graciosete vídeo del nuevo trabajo de Jarvis Cocker, que después de la patochada de Relaxed Muscle, se ha redimido (¡ay que tiempos aquellos de Pulp!).